Me encanta consumir frutos secos, cada vez más. En vacaciones han sido nuestro snack diario.
Es verdad que tienen una alta densidad calórica, pero si limitas su ingesta a 30-50 gr al día no hay problema. Además son calorías supernutritivas que aportan fibra (sobre todo las almendras) grasas "buenas" y proteinas (especialmente los cacahuetes). Aunque comparten una composición similar, cada fruto seco destaca por algo particular:
🥔Almendras: ricas en magnesio y fósforo.
🥔 Nueces: ricas en omega-3 y un poco de melatonina.
🥔 Pistachos: ricos en potasio, vitamina K, luteína para la vista y también son fuente de melatonina.
🥔 Nueces de Brasil: son una excelente fuente de selenio
Por todo ello sus beneficios son múltiples: disminuyen el riesgo de enfermedad coronaria, síndrome metabólico, diabetes...
🌰 Lo ideal es tomarlos enteros y sin procesar (la piel de las almendras y pistachos contienen polifenoles que actúan como prebióticos para nuestra microbiota). E intentar combinarlos para aprovechar las cualidades individuales.
🌰 Las mantequillas también son una buena opción en tostadas y postres, pero ten en cuenta que aportan más calorías y sacían menos. Si las compras fíjate que sean 100% frutos seco, sin azúcar ni aditivos.
🌰 Las harinas de almendras y otros frutos secos se han puesto de moda; yo las uso de vez en cuando para repostería. Son más nutritivas que las de cereales, pero las calorias absorbibles aumentan.
Y recordad que no se deben dar frutos secos enteros a los menores de 4-5 años. Pero a partir de esa edad son un tentempié o merienda perfectos. A los más pequeñines se los podeis dar en forma de mantequilla o harinas desde que inician la alimentación complementaria.
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